Turandot de Puccini desde Turín
Turandot, ópera inconclusa de Giacomo Puccini con libreto de Giuseppe Adami y Renato Simoni, basada en la obra de Carlo Gozzi, completada por Franco Alfano, fue estrenada postumamente, después de un año y medio del fallecimiento del compositor, el 25 de abril de 1926 en el Teatro alla Scala de Milán, dirigida por Arturo Toscanini y protagonizada por Miguel Fleta como el príncipe Calaf.
La ópera, conocida por la célebre aria de Calaf: Nessun Dorma, tiene otra versión final escrita en 2001 de Luciano Berio.
Erika Grimaldi (Liù) y Jorge de León (Calaf)
En esta Turandot, el director musical Gianandrea Noseda toma la drástica decisión de terminar la ópera justo después de la muerte de Liù, exactamente en el punto donde termina la composición de Puccini.
El Teatro Regio de Turín nos ofrece esta nueva producción íntegramente firmada por Stefano Poda, dirección, decorado, vestuario, luces y coreografía. Ensalzando el aspecto coral de la obra dentro de su carácter fuertemente fantástico.
Director Gianandrea Noseda
Turandot Rebeka Lokar
Calaf Jorge de León
Liù Erika Grimaldi
Timur In-Sung Sim
Altoum Antonello Ceron
Ping Marco Filippo Romano
Pang Luca Casalin
Pong Mikeldi Atxalandabaso
Mandarín Roberto Abbondanza
Príncipe persa Joshua Sanders
Orchestra del Teatro Regio
Coro del Teatro Regio
Maestro del Coro Claudio Fenoglio
Director de escena Stefano Poda
Foto Ramella&Giannese
Desde el Teatro Regio de Torino, Italia, vídeo de Turandot de Giacomo Puccini, protagonizado por Rebeka Lokar, Jorge de León y Erika Grimaldi, disponible hasta el 24 de julio de 2018, gentileza de operavision
Comments 5
NO SE NI POR DONDE EMPEZAR. Indudablemente, me estoy poniendo viejo. Despues de 50 años de escuchar y AMAR la òpera en el esplendor del siglo XIX, no temino de entender que quieren hacer los registas «modernosos». Como se puede desvirtuar tanto lo que el genial Puccini nos dejò como legado. Es una puesta tan (pero TAN), descolocada del original que da pena pensar en los cantantes, (estupendos TODOS), que se enfrentaron a semejante desmesura. (Por no agregar otros calificativos que no corresponden en este blog). Encima entiendo menos a la Direcciòn del teatro que autorizò tamaño bodrio.-
Casi siempre la belleza consiste en el extrañamiento de las formas. En este caso la estética creo que se logra en tonos muy suaves y etéreos que funden muy bien con la melodía y la coreografía que, en nada, creo, dificulta la labor de los cantantes. Magnífica la actuación del ballet.
Muchas gracias por este delicado y grandioso obsequio artístico.
Estoy en shock.
Yo tambien en shock. Fantástico el cuerpo de ballet y la escenografía y movimiento en escena de coro y ballet es magnífica y muchos de los cantantes han debido trabajar muy duro. Visulamente es muy poderosa. Lo único que me descoloca y no veo bien es la ocultación de Turandot entre el rssto de figurantes. Yo pensaba que el mimetismo iba a finalizar con la resolución de los enigmas y que al aceptar cada uno iban a ir cayendo figurantes y quedar al final la verdadera Turandot. Y tambien queda en suspenso y con cierta contrariedad dejarla en la muerte de Liu y no concluirla con la versión que suele hacerse.
Pero en forma global, me deja impresionado positivamente.
El problema comenzó el mismo día que alguien empezó a considerar artistas a los directores de escena, cuando jamás debieron pasar de «coordinadores de gremios» o «jefes de tramoya». Para justificar su condición de artistas se ven forzados a situar la Bohème en una nave espacial (¿?), Lohengrin en un colegio o este Turandot cuya descripción requeriría un lenguaje más grueso del permitido. Tampoco ayuda que el crítico de su web escriba. «Ensalzando el aspecto coral de la obra dentro de su carácter fuertemente fantástico» en lugar de tacharla de incalificable.