El Metropolitan Opera House de Nueva York inauguró su temporada 2013/14 con una nueva producción de Deborah Warner de la ópera Eugene Onegin de Tchaikovsky. Reuniendo a un reparto excepcional, como no cabe esperar menos.
Tchaikovsky escribió brillantemente la ópera basada en la novela inmortal de Pushkin, la historia de una época, el romanticismo, de una sociedad y de un héroe atípico, melancólico, que muestra su total desinterés por la vida.
Es precisamente el personaje protagonista, Eugene Onegin, el que eché en falta en la representación del Met, Mariusz Kwiecien, es un buen barítono lírico y cantó más que correctamente, pero no pasó de ahí, no sé si es un problema mío o el cantante polaco desaparece totalmente de escena cuando no canta y todavía peor, no encuentro una transmisión de sentimientos más allá, y no es poco, de una correcta interpretación musical. El profundo vacío existencial de este personaje mítico no lo encontré por ningún lado.
Me dio rabia porque los otros dos protagonistas, la señora Netrebko y el señor Beczala, brillaron a grandísima altura, así como la óptima dirección de Valery Gergiev, de ellos tres y de Oksana Volkova en el papel de Olga no tengo nada que decir, más que disfrutar cada momento de sus interpretaciones.
Vale, no me puedo callar ¡Qué Tatiana! ¡Qué Lensky! Impresionante Piotr, pero… ¡Qué Tatiana! cómo resuelve la dificilísima escena de la carta, con esa intensidad dramática perfecta, llevándonos hipnotizados donde ella quiere, compartimos esas emociones, la angustia, la incertidumbre, la inseguridad o el deseo, con una mezzavoce sublime y ese color que día a día se oscurece de manera natural y nos hace esperar inolvidables veladas con las grandes heroínas del repertorio. Anna, cuidado con lo que cantas, por favor, no nos prives de tu gran futuro.
Lo peor de la noche, qué lástima, fue el Gremin de Alexei Tanovitski, el gran Tchaikovsky escribe para el príncipe, marido de Tatiana, una de las más bellas melodías de todo el repertorio para bajo, y este buen señor la destrozó, cantando entre me trago la voz en la octava aguda y no me la trago en la grave, sin un resquicio de legato y con afinación a decir mucho aproximada. Después de oír “eso” no sé porque Tatiana no se fuga inmediatamente con Onegin. Muy mal.
No anduvo rezagado el terrible Monsieur Triquet de John Grahm-Hall, con una oscilación espantosa que me hace creer que el aparato que lucía en su pierna fuese un oscilazer-vibreitor puesto al máximo, de esos que venden en las teletiendas para bajar peso.
La nueva producción de Deborah Warner , que por problemas de agenda tuvo que dejar la dirección a Fiona Shaw,¿Gelb cómo te dejas hacer eso? fue discretamente aburrida, para mi gusto peor que la anterior de Carsen, pasa de una habitación-taller-almacén sin ninguna gracia de todo el primer acto, desapareciendo la intimidad de Tatiana en la escena de la carta, a un salón mal pintado del segundo, a unas columnas enormes y monótonas en el último.Cansino. El añadido de los besos, de Onegin a Tatiana en el primer acto y al final devuelto por Tatiana a Onegin no me disgustó, la verdad. ¿Duelo con fusiles? ¿por qué?
No os entretengo más aquí os dejo el elenco y la ópera completa representada el 5 de octubre de 2013 en vídeo, gentileza de Logan D.
Eugene Onegin Mariusz Kwiecien
Tatiana Anna Netrebko
Lensky Piotr Beczala
Olga Oksana Volkova
Prince Gremin Alexei Tanovitski
Larina Elena Zaremba
Filippyevna Larissa Diadkova
Triquet John Graham-Hall
Captain David Crawford
Zaretsky Richard Bernstein
Director: Valery Gergiev
Producción Deborah Warner
Dirección de escena Fiona Shaw
Decorados Tom Pye
Vestuario Chloe Obolensky
http://www.youtube.com/watch?v=WsX5xVAYdlg
Comments 2
Nos están dejando con las ganas de ver a Anna Netrebko por segunda ocasión!
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Ya sabes Juan, os dejo algún fragmento
Y de los ensayos